Investigación: Los datos oficiales de los CDC muestran un sorprendente aumento de las muertes por causas anómalas y misteriosas desde que comenzaron las vacunas Covid-19

Artículo en The Expose.

Los datos disponibles del Centro de Control de Enfermedades de los Estados Unidos muestran que desde que se puso en marcha el programa de vacunación con Covid-19 en ese país las muertes debidas a "hallazgos clínicos anormales no clasificados en otra parte" han aumentado esponencialmente en comparación con los niveles anteriores a la vacunación con Covid-19.

Las estadísticas oficiales muestran que el programa de vacunación contra el Covid-19 comenzó en los EE.UU. el 20 de diciembre del 2020, y el 20 de enero de 2021 un total de 14.270.441 personas habían recibido una sola dosis de vacunación contra el Covid-19 (4,3% de la población), mientras que 2.161.419 personas habían recibido dos dosis de vacunación contra el Covid-19 (0,7% de la población).

El ritmo de la implantación de la vacuna Covid-19 parece haberse acelerado realmente en torno al 5 de marzo de 2021, momento en el que el 16,9% de la población había recibido una dosis única, y el 8,7% de la población había recibido dos dosis, ya que el 24 de abril estos datos habían aumentado hasta el 42,1% de la población (dosis única) y el 28,2% de la población (dos dosis).

Pero hay algo más que empezó a aumentar sospechosamente al mismo tiempo, y fueron las muertes debidas a hallazgos clínicos anormales no clasificados de ninguna otra forma.

El gráfico anterior se ha estraído de los datos oficiales de los CDC, que pueden buscarse aquí (véase al final la Referencia 1), y muestra el número de muertes semanales debidas a "síntomas, hallazgos clínicos y de laboratorio anormales no clasificados de ninguna otra forma".

La Organización Mundial de la Salud afirma que las muertes en esta categoría consisten en lo siguiente:

- Casos para los que no se puede hacer un diagnóstico más específico, incluso después de haber investigado todos los hechos relacionados con el caso.
- Signos o síntomas que se han encontrado en un comienzo y que resultaron ser transitorios y cuyas causas no pudieron determinarse.
- Diagnósticos provisionales en un paciente que no ha vuelto para ser investigado o atendido.
- Casos remitidos a otro lugar para investigación o tratamiento antes de que se hiciera el diagnóstico.
- Casos en los que no se disponía de un diagnóstico más preciso por cualquier otro motivo.
- Ciertos síntomas para los que se proporciona información complementaria, que representan problemas importantes en la atención médica por derecho propio.

Como se puede ver en el gráfico anterior, el número de muertes debidas a hallazgos clínicos anormales no clasificados de ninguna otra forma ha mantenido una media constante de algo más de 1.000 a la semana desde febrero de 2020, y también estaba en estos niveles antes de que la supuesta pandemia afectara a los Estados Unidos.

Sin embargo, a finales de marzo y principios de abril de 2021, se produjo un repunte en el número de muertes anormales registradas por semana, subiendo repentinamente a 2.000 por semana a mediados de abril, antes de aumentar a más de 7.000 por semana a mediados de septiembre, lo que representa un aumento del 600% en el promedio observado cada semana antes del inicio del despliegue de la vacunación Covid-19.

La pregunta es, por supuesto, ¿por qué? La correlación no siempre es igual a la causalidad, pero las similitudes en el siguiente gráfico son ciertamente muy sospechosas.

El gráfico anterior muestra el número acumulado de dosis de vacunas Covid-19 administradas en los Estados Unidos por semana junto con el número de muertes semanales registradas debidas a síntomas, hallazgos clínicos y de laboratorio anormales no clasificadas de ninguna forma.

Como se puede ver, el gran aumento con un ligero descenso tanto en el número de vacunas como en el número de muertes anómalas son estremadamente similares, lo que sugiere que las inyecciones esperimentales para el Covid-19 son la causa de un aumento del 600% en las muertes anormales.

Sabemos que las muertes no se deben al Covid-19, ya que se clasificarían como tales si lo fueran, y el aumento de las muertes anormales no se produjo tras la introducción del supuesto virus del SARS-CoV-2 en los Estados Unidos. Lo único que tienen en común millones de personas desde que empezaron a aumentar las muertes anormales en contra de la media prevista, es que a millones de personas se les ha administrado una inyección esperimental, de la que no hay datos de seguridad a largo plazo para saber cuáles van a ser sus consecuencias.

Los datos oficiales de los CDC sugieren que las consecuencias de un despliegue masivo de vacunas esperimentales son un aumento escandaloso en el número de muertes debidas a causas anormales no identificadas. Si no es una consecuencia entonces es una coincidencia diabólica, pero en tal caso una vez más parece que estamos viviendo en la "era de las coincidencias".

Referencia 1:

Para ver los datos sobre el número de muertes anormales en el sitio del CDC hay que hacer lo siguiente:

- Seleccionar el gráfico de la línea de tiempo en las opciones de gráfico situadas en la parte superior central de la página.
- Establecer la "Dimensión" como "Datos de fin de semana".
- Establecer la "Medida" como "Síntomas, signos y hallazgos clínicos y de laboratorio anormales, no clasificados en ningún otro sitio".
- Seleccionar "Eje" en la columna de la izquierda
- Ir a "Ordenación de gráficos" y seleccione "Ascendente por etiqueta".

Ir a los datos de los CDC.

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